domingo, 23 de junio de 2013

El diccionario abierto...

El diccionario abierto:
cuántos nombres que duelen.
¿Cree amurallarse el ser humano
con las piedras científicas,
lenguaje sobre lenguaje,
lenguaje de una ilusión para el combate perdido?
Cuántas "itis", cuántas "osis",
qué tragedias tan fríamente dichas.
Parece que el cristal de los sufijos no cortara,
soñar con romperlo, no delirio,
este puño fantástico, sí humano que golpea
y fiel derrota
pese a todos los triunfos:
atacar tan sólo es defenderse.
La muralla de los nombres,
inteligente medicina condenada
pues la vida, la otra vida,
la no nuestra,
se abrirá paso al fin entre nosotros
sin nosotros.
Quede, no obstante, el diccionario abierto,
los fantasmas nombrados hasta la extenuación:
todo fantasma dicho cicatriza.

2 comentarios:

  1. Qué verdad tan clara, Antonio. Qué preciosa forma de contarlo. Cómo me gusta este poema.

    Un abrazo
    Victoria

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  2. Muchísimas gracias, Victoria, por tu lectura y tus palabras.

    ¡Otro abrazo para ti!

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